Los duques de Sussex, Enrique y Meghan, han manifestado que tienen intención de alejarse de sus obligaciones oficiales como miembros «senior» de la monarquía y «trabajar para ser financieramente independientes». Esto, a un año y medio después de su mediática boda en el castillo de Windsor (Inglaterra).
Afirmaron que pretenden balancear su tiempo entre Reino Unido y Norteamérica, siempre honrando su deber hacia la reina Isabel II, el ´Commonweath´ y su patronato. A demás aseguraron que ese balance geográfico le permitirá criar a su hijo Archie Harrison con una apreciación por la tradición real en la que nació y a la misma vez le permitirá a su familia un espacio para enfocarse en un nuevo capítulo.
La información se dio a conocer a través de su cuenta de Instagram, la cual cuenta con más de 10 millones de seguidores.
Este comunicado pone fin a las especulaciones sobre la posibilidad de que la pareja se mudara fuera del Reino Unido, debido a las constantes manifestaciones de incomodidad, de parte de la pareja, que vivían con la prensa.